MANIFIESTO 4 DE DICIEMBRE, NO AL ESTATUTO DE LA TRAICIÓN
El cuatro de diciembre de 1977, el Pueblo Andaluz tomó las calles de todas las ciudades andaluzas, para exigir al Gobierno Estatal que considerase a Andalucía en pié de igualdad con aquellos territorios que se proclamaron nacionalidades históricas (Cataluña, Euskadi y Galicia). Estos territorios serían considerados de primera, obtendrían su autogobierno mediante el Art. 151 de la Constitución, por lo que tendrían un carácter jurídico, unas competencias y una financiación superior a los demás territorios del Estado, que serían denominados por la Constitución como regiones y que obtendrían un autogobierno muy limitado a través del Art. 143 de la Constitución.
El cuatro de diciembre de 1977 el Pueblo Andaluz, salió a la calle a luchar por su autonomía. Una lucha complicada, puesto que fueron innumerables las trabas que el Gobierno puso para que Nuestro Pueblo no alcanzase las mayores cotas de autogobierno, trabas tales como la modificación de la Ley de Referéndum aprobada en las Cortes Estatales por PSOE y UCD.
Pero los andaluces demostramos a los partidos centralistas que estaban equivocados, aquel 4 de diciembre resurgió la verdadera conciencia del Pueblo Andaluz, la conciencia de un Pueblo unido ante la adversidad, ante las zancadillas que PSOE y UCD ponían a su paso, en el camino hacia la autonomía plena. Tal fue la fuerza de nuestro Pueblo, que el Gobierno Central se vio abocado a ceder y a convocar un Referéndum, el 28 de Febrero de 1980, en el cual seríamos los andaluces los que decidiríamos nuestro futuro, y Nuestro Pueblo decidió que lo que quería era una autonomía plena, éramos un pueblo que quería autogobernarse.
29 años después, encontramos al Estado inmerso en un proceso de Reforma Estatutaria, los diferentes territorios del Estado reforman sus respectivos Estatutos de Autonomía, Catalunya ha cerrado un Estatuto que rompe la baraja, un estatuto que les proporciona un grado de autogobierno y financiación envidiables (5.700 millones de € al año, bilateralidad con el Gobierno Central, cierre de competencias), además de reconocer la identidad nacional de Catalunya, Galicia está cerrando uno con similares características, y lo mismo hará Euskadi.
Mientras tanto el tripartito de la vergüenza PSOE-IU-PP, ha elaborado el Estatuto de la Traición, un Estatuto que nos condena a la segunda división, un Estatuto que nos avoca y condena a jamás salir del vagón de cola del Estado, y lo peor de todo, un Estatuto que traiciona y pisotea todas las ilusiones, todos los sentimientos y todas las lágrimas derrochadas por nuestros padres y nuestras madres, por nuestros abuelos, todos andaluces, aquel 4 de Diciembre de 1977 y aquel 28 de Febrero de 1980. ¿Cuánto tiempo hará falta, cuántas generaciones de andaluces tendrán que pasar hasta que volvamos a recuperar las cotas de autogobierno que se consiguieron entonces? ¿Estamos dispuestos a meter todas nuestras luchas en el cajón del olvido?.
Esta nueva generación de andaluces, estamos obligados a volver a demostrarle a los Partidos centralistas, que se vuelven a equivocar, que no vamos a dejar que decidan sobre nuestro futuro como lo han hecho, mercadeando una “bazofia” de Estatuto a nuestras espaldas, un Estatuto, el de la traición que nos condena durante los siguientes 25 o 30 años a ser jóvenes de segunda, no podemos dejar que jueguen así con nuestro futuro.
Por eso desde Juventudes Andalucistas, hacemos un llamamiento a todos los jóvenes andaluces a que digáis NO y deis la espalda al Estatuto de la Traición. QUE NO JUEGUEN CON TU FUTURO, NO AL ESTATUTO DE LA TRAICIÓN.
El cuatro de diciembre de 1977, el Pueblo Andaluz tomó las calles de todas las ciudades andaluzas, para exigir al Gobierno Estatal que considerase a Andalucía en pié de igualdad con aquellos territorios que se proclamaron nacionalidades históricas (Cataluña, Euskadi y Galicia). Estos territorios serían considerados de primera, obtendrían su autogobierno mediante el Art. 151 de la Constitución, por lo que tendrían un carácter jurídico, unas competencias y una financiación superior a los demás territorios del Estado, que serían denominados por la Constitución como regiones y que obtendrían un autogobierno muy limitado a través del Art. 143 de la Constitución.
El cuatro de diciembre de 1977 el Pueblo Andaluz, salió a la calle a luchar por su autonomía. Una lucha complicada, puesto que fueron innumerables las trabas que el Gobierno puso para que Nuestro Pueblo no alcanzase las mayores cotas de autogobierno, trabas tales como la modificación de la Ley de Referéndum aprobada en las Cortes Estatales por PSOE y UCD.
Pero los andaluces demostramos a los partidos centralistas que estaban equivocados, aquel 4 de diciembre resurgió la verdadera conciencia del Pueblo Andaluz, la conciencia de un Pueblo unido ante la adversidad, ante las zancadillas que PSOE y UCD ponían a su paso, en el camino hacia la autonomía plena. Tal fue la fuerza de nuestro Pueblo, que el Gobierno Central se vio abocado a ceder y a convocar un Referéndum, el 28 de Febrero de 1980, en el cual seríamos los andaluces los que decidiríamos nuestro futuro, y Nuestro Pueblo decidió que lo que quería era una autonomía plena, éramos un pueblo que quería autogobernarse.
29 años después, encontramos al Estado inmerso en un proceso de Reforma Estatutaria, los diferentes territorios del Estado reforman sus respectivos Estatutos de Autonomía, Catalunya ha cerrado un Estatuto que rompe la baraja, un estatuto que les proporciona un grado de autogobierno y financiación envidiables (5.700 millones de € al año, bilateralidad con el Gobierno Central, cierre de competencias), además de reconocer la identidad nacional de Catalunya, Galicia está cerrando uno con similares características, y lo mismo hará Euskadi.
Mientras tanto el tripartito de la vergüenza PSOE-IU-PP, ha elaborado el Estatuto de la Traición, un Estatuto que nos condena a la segunda división, un Estatuto que nos avoca y condena a jamás salir del vagón de cola del Estado, y lo peor de todo, un Estatuto que traiciona y pisotea todas las ilusiones, todos los sentimientos y todas las lágrimas derrochadas por nuestros padres y nuestras madres, por nuestros abuelos, todos andaluces, aquel 4 de Diciembre de 1977 y aquel 28 de Febrero de 1980. ¿Cuánto tiempo hará falta, cuántas generaciones de andaluces tendrán que pasar hasta que volvamos a recuperar las cotas de autogobierno que se consiguieron entonces? ¿Estamos dispuestos a meter todas nuestras luchas en el cajón del olvido?.
Esta nueva generación de andaluces, estamos obligados a volver a demostrarle a los Partidos centralistas, que se vuelven a equivocar, que no vamos a dejar que decidan sobre nuestro futuro como lo han hecho, mercadeando una “bazofia” de Estatuto a nuestras espaldas, un Estatuto, el de la traición que nos condena durante los siguientes 25 o 30 años a ser jóvenes de segunda, no podemos dejar que jueguen así con nuestro futuro.
Por eso desde Juventudes Andalucistas, hacemos un llamamiento a todos los jóvenes andaluces a que digáis NO y deis la espalda al Estatuto de la Traición. QUE NO JUEGUEN CON TU FUTURO, NO AL ESTATUTO DE LA TRAICIÓN.
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